COGUAYPE BCS DESEA SER PARTE DEL COMERCIO JUSTO Y LO VAMOS A INTENTAR...!!!
http://www.fundacionseres.org/Lists/Informes/Attachments/94/Guia-Comercio-Justo.pdf
GUÍA SOBRE COMERCIO JUSTO
Índice
Introducción: ¿por qué una Guía de Comercio Justo?
¿Qué es el Comercio Justo?
¼ Es exactamente: ¡comercio, no ayuda!
¼ Una definición…
¼ Las injustas reglas del Comercio Internacional
¼ El fenómeno de la deslocalización y sus implicaciones sociales
¼ Algunos datos para reflexionar…
¼ ¿Cómo debería ser para ser justo?
¼ Comercio Justo, una alternativa ética
Breve Historia del Comercio Justo
¿Quiénes son los Actores del Comercio Justo?
Principios o Criterios del Comercio Justo
¼ Criterios para los productores
¼ Criterios para las Organizaciones de Comercio Justo (OCAs):
³ Criterios para las Importadoras
³ Criterios para las Tiendas
Funcionamiento del Comercio Justo
¼ El Comercio Justo en España
¼ Las organizaciones españolas de Comercio Justo
Productos y Ejemplos de Cooperativas
Redes Internacionales y la Asociación del Sello de Productos de Comercio
Justo en España
Responsabilidad Social: Compra Pública Ética
El Consumidor ¿qué papel juega?
Anexos
Introducción: ¿por qué una Guía de Comercio Justo?
El Comercio Justo nace en Europa en la década de los años 60
como una alternativa frente a las desequilibradas relaciones comerciales existentes entre los países del Norte (desarrollados) y los países del Sur (empobrecidos y/o en vías de desarrollo) que perjudican y empobrecen a los habitantes de los paí-
ses del Sur, convirtiéndolos en mano de obra barata o cultivadores de productos para la
exportación, con precios cada vez más bajos e insuficientes para poder mantener un nivel
de vida digno.
Cientos de Organizaciones No Gubernamentales (ONGs), cooperativas, colectivos de
productores de los países del Sur y otros grupos han trabajado para construir una red de
intercambio, apoyo mutuo y comercialización.
A partir de las recomendaciones de esas organizaciones, la Unión Europea ha realizado
diversas declaraciones institucionales de apoyo al Comercio Justo, especialmente a partir
de la década de los años 90.
Así, cabe citar la "Resolución sobre un Comercio Justo entre el Norte y el Sur" adoptada por el Parlamento Europeo en el año 1994. Como antecedente de ésta cabría citar la
"Resolución sobre el consumo de café del Tercer Mundo y sobre la introducción de este
café en las instituciones comunitarias" adoptada también por el Parlamento Europeo en el
año 1991.
Posteriormente, el Comité Económico y Social de la Unión Europea manifestó su apoyo
a la creación de una etiqueta europea común de Comercio Justo, tomando como base
el documento "Movimiento a favor de una marca de Comercio Justo europea" de 1996 y
la "Resolución a favor del Comercio Justo" de 1998.
Recientemente, en el año 2004, la Unión Europea dio a conocer el "Plan de acción sobre
productos agrícolas, dependencia y pobreza".
En España se aprobó la Ley de Cooperación Internacional para el Desarrollo en 1998,
que supone un reconocimiento del Comercio Justo como una forma más de la cooperación internacional española.
El apoyo al Comercio Justo también surge desde el ámbito de la sostenibilidad. Así, el
apoyo al Comercio Justo aparece vinculado al consumo responsable en el Plan estratégico de protección al consumidor 2002-2005 del Instituto Nacional del Consumo.
En el ámbito de la administración local, enmarcado en la Agenda 21, el Plan de Compromiso
Ciudadano reconoce el Comercio Justo como una vía de mejora de la sostenibilidad.
Actualmente, la Coordinadora Estatal de Comercio Justo afirma que el 25% de los espa-
ñoles conoce lo que es el Comercio Justo, a pesar de que España 'se subió a este tren'
con más de 20 años de retraso.
Hay que destacar como iniciativa impulsada desde la Coordinadora Estatal de Comercio
Justo, la creación en 2005 de la Asociación del Sello de Productos de Comercio Justo,
formada actualmente por distintas organizaciones representantes de la sociedad civil,
entre las que se encuentra la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU).
La Confederación de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECUMadrid), con el apoyo
de la antigua Dirección General de Alimentación y Consumo de la Comunidad de Madrid,
facilitó a los consumidores y consumidoras un conocimiento y reflexión detallados sobre
el Comercio Justo, con la elaboración, publicación y difusión de una guía sobre Comercio
Justo titulada "Ellos, nosotros y los demás".
Tomando como base la anterior publicación, la presente guía pretende trasladar a los consumidores madrileños y madrileñas información actualizada sobre el Comercio Justo y su presencia en la Comunidad de Madrid; todo ello como parte del ejercicio de los derechos básicos de información, educación y formación al consumidor, por un lado, y, por otro, como
parte del deber de los ciudadanos a ejercer un consumo crítico y responsable.
¼ Es exactamente: ¡comercio, no ayuda!
En 1964, la "Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo" (UNCTAD)
realizó su primera reunión bajo el lema "Comercio, no ayuda", en donde se definieron una
serie de propuestas a favor de nuevas relaciones entre los países ricos y los empobrecidos por la práctica de un intercambio desigual y la explotación de sus recursos.
La novedad del Comercio Justo es que las organizaciones de los países desarrollados
o del Norte, no se limitan a transferir recursos para crear infraestructuras, capacitar o prefinanciar a los grupos productores, sino que participan activamente en la comercialización
mediante la importación, distribución o venta directa al público. Además, realizan una
importante labor de denuncia y concienciación.
En los países en vías de desarrollo, empobrecidos o del Sur, las comunidades más pobres
se organizan para conseguir una vida digna. Forman cooperativas de campesinos, grupos de
mujeres, artesanos, asociaciones de carácter social (que trabajan con niños y niñas de la calle,
con marginados, etc.). Son los productores, el primer eslabón del Comercio Justo.
El resultado de su trabajo es un sinfín de productos de alimentación, textiles y artículos
de artesanía (café, cacao, chocolate, azúcar, ropa, artículos para el hogar, cerámica, bisutería, marroquinería, juguetes...).
Aquí, en los países del Norte, las organizaciones de Comercio Justo trabajan con estos
grupos, con el fin de abrir mercado a sus productos. Así, las importadoras y las tiendas
de Comercio Justo hacen posible que sus artículos lleguen a nuestras manos.
Hoy en día, el Comercio Justo es un movimiento internacional que reclama y promueve
unas relaciones más equilibradas entre los países del Norte y del Sur y que fomenta un
Consumo Responsable.
¼ Una definición…
Las principales organizaciones de Comercio Justo a escala internacional han consensuado la siguiente definición:
"El Comercio Justo es una asociación de comercio, basada en el diálogo, la transparencia y el respeto, que busca una mayor equidad en el comercio internacional. Contribuye
a un desarrollo sostenible ofreciendo mejores condiciones comerciales y asegurando los
derechos de productores y trabajadores marginados, especialmente en el Sur. Las organizaciones de Comercio Justo, apoyadas por los consumidores, están implicadas activamente en apoyar a los productores, sensibilizar y desarrollar campañas para conseguir
cambios en las reglas y prácticas del comercio internacional convencional."
Por consiguiente, el Comercio Justo es aquel tipo de comercio en el que se intercambian
productos de países en vías de desarrollo o del Sur, garantizando una serie de condiciones justas a los productores y el cumplimiento de una serie de normas a los distribuidores,
de modo que se rompan las desigualdades existentes en el mercado internacional.
¼ Las injustas reglas del Comercio Internacional
La necesidad de dar a conocer el Comercio Justo presupone que el comercio, tal y
como se desarrolla en la actualidad es un comercio injusto. Las relaciones comerciales
internacionales se caracterizan y se han caracterizado, mayormente, por la imposición de
condiciones por parte de los países desarrollados.
Aunque las relaciones económicas con los países empobrecidos ya no sufran los niveles de expoliación de la época colonial, su realidad actual dista mucho de ser una situación idílica de intercambio igualitario. La herencia colonial ha significado, en muchos de
estos países, la permanencia de una economía basada casi en su totalidad en la exportación de uno o más productos básicos. Por citar algún ejemplo, tenemos el caso de
Filipinas y el azúcar, Uganda con el café, Ghana y el cacao, etc. Tal panorama conlleva una
dependencia casi absoluta de los precios arbitrados por las grandes potencias, un predominio del monocultivo y la escalonada insuficiencia de otros medios para subsistir.
Observamos cómo muchos países del Sur han conseguido introducirse en el mercado internacional exclusivamente a través de la venta de uno o unos pocos productos que son los que
interesan a los compradores de los países desarrollados (café, té, cacao, cacahuetes, bananas,
minerales...). Esta dependencia de un monocultivo provoca graves carencias estructurales para
el desarrollo de sus economías, de su sociedad y causan graves impactos medioambientales.
El escenario es el siguiente: hay que señalar cómo los países empobrecidos o en vías de
desarrollo se han especializado tradicionalmente en la exportación de materias primas y alimentos sin elaborar. Como resultado, tenemos el quebranto de la relación real de intercambio, ya que los precios de las materias primas disminuyen constantemente en comparación
con el precio de los productos manufacturados procedentes de los países desarrollados.
Progresivamente, los países más ricos se han ido dotando de herramientas para proteger sus exportaciones y sus mercados: los altos aranceles sobre los productos trabajados
y las fuertes subvenciones a la exportación de muchos de sus productos agrícolas determinan una desigualdad comercial mundial cada vez mayor.
Se llega así a verdaderos desastres económicos y sociales: el azúcar subvencionado
europeo invade y arruina el mercado y a los cultivadores de Filipinas; al igual que el maíz
de Estados Unidos perjudica gravemente al mercado centroamericano, por mencionar
algún ejemplo de "dumping" de los más emblemáticos.
En cambio, muchos países del Sur han visto sus exportaciones seriamente dañadas por
la evolución de los precios de esos productos primarios, precios que han seguido una
tendencia descendente sin reflejar los costes del proceso productivo, estando sujetos a
las variaciones que se producen en los mercados de valores en los que cotizan y a los
caprichos de los especuladores.
La influencia del comercio internacional, resulta aún más injusta si observamos cómo la
dependencia de las exportaciones, que cada vez aportan menos divisas con las que
pagar la deuda externa, ha provocado la reconversión de las economías locales incluso a
costa de la propia alimentación de la población local.
En la actual economía globalizada, la competencia entre las empresas se ha vuelto cada
vez más dura. A la incapacidad de los Estados de poner en práctica reglas jurídicas universalmente compartidas en el comercio internacional, se suma un mercado global anárquico, en el que se deja amplio espacio de actuación a comportamientos de empresas
que resultan evasivos y éticamente discutibles.
¼ El fenómeno de la deslocalización y sus implicaciones sociales
Desde hace muchos años las empresas, especialmente las multinacionales, han experimentado que producir en países empobrecidos o en vías de desarrollo "cuesta menos"
desde el punto de vista económico y legislativo. Además de los conocidos paraísos fiscales, se encuentran con "limbos" normativos en los que el capital extranjero es atraído por
la escasa reglamentación laboral y medioambiental.
Estos países empobrecidos, debido a las altas tasas de desempleo, las economías
sumergidas, la ausencia de legislación de sus propios países, entre otras causas, están a
merced de las empresas multinacionales que contratan en condiciones de absoluta precariedad. Estas condiciones, las sufren especialmente las mujeres y la infancia, colectivos
más vulnerables, aptos, manipulables e indefensos para determinados trabajos.
El Sur del mundo, con la gran oferta de mano de obra y sueldos ínfimos, ha resultado
ser la elección ideal para trasladar la producción textil, electrónica y de juguetes.
Como ejemplo tenemos que la mayoría de las empresas textiles y de calzado deportivo subcontrata la producción a todo el Sudeste Asiático, especialmente a China. En
España, en los últimos años ha desaparecido la mayoría de esta industria textil.
Otro ejemplo más cercano lo encontramos en Europa del Este, donde los trabajadores
son bastante cualificados, el parque industrial ha sido cedido a precios bajísimos y carece de limitaciones medioambientales. Aquí las multinacionales han aprovechado para instalar la producción alimentaria, química y mecánica.
Si podemos comprar bienes y servicios a precios ridículos es porque alguien contribuye a producirlos trabajando jornadas de más de doce horas diarias por un salario ínfimo
y, muchas veces, dañando de forma irremediable su salud.
Quien comercializa esta producción se justifica invocando la competencia como límite
imperioso a su discrecionalidad: justificación completamente insuficiente frente a unas condiciones de trabajo abusivas, y además falsa, porque muchos productos de marca se venden
en las tiendas occidentales a precios altísimos y descompensados en relación a su coste de
producción.
¼ Algunos datos para reflexionar
1
…
• El 86% del consumo personal mundial está en manos del 20% de la población, mientras
que más de mil millones de personas no pueden satisfacer sus necesidades básicas.
• El 80% de los intercambios comerciales mundiales se realiza entre países del Norte,
un 4% es comercio Sur- Sur, y el resto corresponde al comercio Norte-Sur.
• El precio del café se fija en la bolsa de Nueva York donde el volumen de negocio es
14 veces superior a la producción real, lo que ha originado que si en 1997 se pagaban 180 centavos de $ por libra de café, en 2002 se pagaban 47,30 centavos de $.
• Más de la mitad de los ingresos por exportación de dos de cada tres países africanos y 18 países de América Latina dependen de las materias primas.
• Entre el 65% y el 95% de las exportaciones de varios países africanos dependen únicamente de la venta exterior de café y de cacao.
• Entre 1984 y 1992 el precio del café ha caído un 80 %. El empobrecimiento progresivo de la población por este motivo va a ser uno de los factores no reconocidos que explican el aumento de las tensiones en la zona de los Grandes Lagos de
África a partir de los años 90; en el caso de Ruanda y Burundi va a desembocar en
una escalada de violencia y en los posteriores conflictos bélicos de 1994.
• Hoy en día las primeras 600 multinacionales controlan el 50 % de la producción
industrial y el 20 % de toda la producción mundial, incluidos los servicios.
• La Campaña internacional "Ropa Limpia" hace un llamamiento para que se tomen
medidas urgentes para remediar la extrema precariedad de las condiciones de trabajo en la industria textil en Bangladesh:
En 2000, mueren 53 trabajadores de la fárbica Choudury Knitwear.
En 2001, mueren 24 trabajadores de la fárbica Maico Sweater.
En 2004, 9 muertos en Misco Supermarket.
En 2005, 23 muertos en la fárbica Shan Knitting y 64 muertos en Spectrum-Shahriyar.
• La situación de precariedad laboral y violación sistemática de derechos humanos
afecta al 80% de los trabajadores de la industria textil que produce ropa y complementos para las cadenas multinacionales.
• Hay 250 millones de menores trabajadores en todo el mundo (132 millones de niños
y 113 millones de niñas); de ellos, entre 170 y 175 millones sufren las peores formas
de trabajo, como explotación sexual, trabajo forzoso, servidumbre por deudas o
reclutamiento para la guerra.
1
Datos obtenidos de las siguientes instituciones y organizaciones:
• Informe sobre Desarrollo Humano, Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
• Informe anual de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
• Informes estadísticos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación
(FAO).
• Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
• Organización Internacional del Trabajo (OIT).
·• Campaña internacional "Ropa Limpia".
• La UNCTAD ha calculado que la supresión de todas las medidas discriminatorias en
los sectores del textil y de la confección aumentaría el empleo entre un 20 y un 45%
en los países en desarrollo. En cuanto al incremento en los ingresos por exportación,
las estimaciones varían de algunos miles de millones a 60 mil millones de dólares
anuales. Un dato comparable con la ayuda al desarrollo que los países de la OCDE
ofrecen cada año. No es de extrañar, pues, que "Trade, not aid" (comercio, no
ayuda) sea, desde hace muchos años, el lema de los países en desarrollo.
¼ ¿Cómo debería de ser para ser justo?
Acabamos de exponer que una de las causas sobre las grandes desigualdades entre el
Sur y el Norte son las relaciones comerciales.
El Norte marca las reglas del juego -competitividad y máximo beneficio a cualquier precio-, a costa de un Sur -fuente de materias primas y mano de obra barata- cada vez más
empobrecido.
La explotación laboral, la explotación infantil, la esclavitud, la discriminación de la mujer,
las condiciones de trabajo insalubres, los salarios de miseria, la destrucción del medio
ambiente, etc…son algunas de las circunstancias que forman parte, con bastante frecuencia y sin que seamos conscientes de ello, del precio que pagamos en nuestras compras.
Por lo tanto, los productores de los países del Sur o en vías de desarrollo deberían
recibir un dinero acorde con los costes de producción, de forma que no dependan
de las fluctuaciones del mercado y puedan mantener unas condiciones de vida dignas. Tendrían que tener la opción de transformar sus materias primas, sabiendo que
podrán vender sus productos a los países desarrollados, sin tener que pagar unos
impuestos excesivos e injustos en la aduana.
Para llegar a un Comercio Justo y solidario hacen falta fair r les, reglas internacionales
equilibradas y eficientes, fair contracts, contratos que vinculen a los productores locales
con el respeto de los derechos socio-económicos de los trabajadores y las trabajadoras,
y fair practices, comportamientos responsables de todos los actores del mercado.
Visto el actual panorama del comercio internacional, como consumidores/as, debemos
ser conscientes del "poder" que tenemos. Todas las empresas tienen muy en cuenta lo
que demandamos o podemos demandar en un futuro, por lo cual, podemos y debemos
ejercer dicho "poder" para empezar a cambiar el injusto sistema de comercio existente
modificando nuestros hábitos de consumo e iniciando un Consumo Responsable.
Finalmente, debemos saber que existen ciertos mecanismos que permitirían cambiar
este escenario y que deben supeditarse tanto a la acción pública como a la responsabilidad privada.
¼ Comercio Justo, una alternativa ética
El respeto de la dignidad humana y las razones de solidaridad han trazado el camino de
un sistema de intercambio alternativo, el Comercio Justo y Solidario, inspirado en una
nueva relación con la producción y el consumo.
El Comercio Justo constituye una gran línea de acción para la promoción del desarrollo
frente a otras fórmulas de cooperación como la Ayuda Oficial al Desarrollo, según lo ha
reconocido la Comisión Europea.
Rechazando la ley del más fuerte que gobierna en la economía de libre mercado, y
renunciando al consumismo frenético y al individualismo exasperado, se propone la ayuda
a los pequeños productores de los países del Sur con un sistema que primero crea cultura y sugiere nuevos estilos de vida en los países ricos, y luego organiza el comercio inspirándolo en la ética y la equidad.
En el Comercio Justo se establecen unas relaciones comerciales basadas en el
trato directo y el respeto mutuo, con criterios no sólo económicos sino también
sociales y medioambientales.
En los países del Sur, las comunidades más pobres se organizan para
conseguir una vida digna. Forman cooperativas de campesinos, grupos
de mujeres, artesanos, asociaciones de carácter social (que trabajan
con niños y niñas de la calle, con personas en riesgo o excluidas
socialmente). Son los productores, el primer eslabón del Comercio
Justo.
El Comercio Justo permite a los productores liberarse de los intermediarios y especuladores locales, huyendo del control de las empresas
extranjeras y obteniendo salidas directas a nuestro mercado.
Garantizando un precio justo a los productores y prefinanciando
su suministro (pagando antes de la entrega), se logra ofrecer condiciones de vida y de trabajo más humanas y se combate la usura sin
escrúpulos, en la que los más pobres encuentran refugio cuando la
cosecha vendida no garantiza medios de subsistencia y no permite pagar
las deudas. No se trata de asistencia caritativa, sino sólo de Comercio Justo,
sin especulación.
En los países del Norte, las organizaciones de Comercio Justo trabajan con estos grupos o cooperativas, con el fin de abrir mercado a sus productos. Así, las importadoras y
las tiendas de Comercio Justo hacen posible que sus artículos lleguen a nuestras manos.
El movimiento de Comercio Justo se ocupa de comercializar y distribuir los productos
del Sur, y además; tiene en su activo muchas campañas de sensibilización, algunas de las
cuales han resultado transcendentales para denunciar gravísimas situaciones.
El movimiento de Comercio Justo nació en Europa, a raíz de la primera
Conferencia de la UNCT D (Comercio y Desarrollo de las Naciones Unidas)
celebrada en Ginebra en 1964. Los países del mal llamado Tercer Mundo, cuyos dirigentes
estrenaban nuevos gobiernos nacionales como resultado de la lucha por la descolonización,
presionaron bajo el lema "Comercio, no ayuda", exigiendo a los países ricos de la metrópoli
que abrieran sus fronteras a los productos agrícolas del Tercer Mundo.
Los países del Sur fueron quienes empezaron a reclamar el libre comercio, pero asombrosamente los países ricos se negaron a ello, al constatar que los precios agrícolas del
Tercer Mundo podían ser muy competitivos y prefirieron optar por la estrategia de protegerse con aranceles y negarles el libre mercado.
Entretanto en la década de los 60, una fundación comercial de nuevo tipo que más tarde
se llamaría Comercio Alternativo o Comercio Justo surgía en Europa, como una alternativa
para luchar contra las injustas relaciones comerciales existentes entre el Norte y el Sur.
A mediados de los 60, estas organizaciones de apoyo a los países del Sur comienzan
a importar productos de artesanía para venderlos en Europa por catálogo o mediante grupos de solidaridad.
Todo ello fue posible gracias a que existía un público sensibilizado hacia los países
empobrecidos y con cierto nivel de ingreso, que aceptó esta nueva forma de hacer solidaridad y comenzó a comprar productos de los países del Sur.
Es en 1969 cuando se abre en Holanda (Brenkelen) la primera "tienda solidaria", y dos
años más tarde en este país ya existen 120 tiendas. Tardaría aún más en introducirse el primer café de Comercio Justo procedente de cooperativas de Guatemala que empezó a
importarse en Europa en 1973.
Desde entonces, el Comercio Justo ha crecido considerablemente, extendiéndose por
toda Europa y también por Australia, Canadá, EE.UU. y Japón.
El Comercio Justo como movimiento está compuesto en Europa por unas 3.000 tiendas, llegando a unos 70.000 puntos de venta diversos. Hay más de 50.000 personas voluntarias (otros
censos dan una cifra incluso de casi 100.000 personas) y unos 1.500 profesionales en esta
causa solidaria. La cuota de mercado ha logrado importancia en algunos productos, a modo
de ejemplo sirva el 3-5% medio de cuota de mercado para el café según país europeo.
Con más de veinte años de retraso respecto a otros países europeos, a finales de 1986 surgieron en España las primeras iniciativas de Comercio Justo con la apertura de dos tiendas, una
en el País Vasco (Traperos de Emaús) y la otra en Andalucía (Cooperativa Sandino, actualmente I.D.E.A.S.); en 1996 se crea la Coordinadora de Organizaciones de Comercio Justo.
Actualmente, en España hay 27 organizaciones pertenecientes a la Coordinadora Estatal
de Organizaciones de Comercio Justo, con más de 50 puntos de venta reconocidos en
todo el territorio nacional y cuyo volumen de ventas aumenta año a año.
Los productos de Comercio Justo son productos con historia. Detrás de ellos, se
encuentran las manos de los productores que los han trabajado y las organizaciones
que han apoyado su producción, distribución y facilitado su venta en el mercado.
PRODUCTORES: son el primer eslabón de la cadena comercial, son la relación directa
con la cultura, la naturaleza y el entorno social de cada uno de los productos. El
Comercio Justo trabaja por la dignificación del esfuerzo y reconocimiento de los productores, que al insertarse en este movimiento reciben, directa o indirectamente, asistencia técnica, recursos, asesoría empresarial y acceso al mercado internacional.
IMPORTADORAS: compran productos a las organizaciones productoras, pagándoles un
precio establecido de común acuerdo, que les permite vivir en condiciones dignas y
acceder a nuevas oportunidades de educación y desarrollo económico y social. Las
organizaciones importadoras pueden también apoyar a los productores de otras formas: financiando por adelantado la producción, asesorándoles en la mejora de los productos, con apoyo técnico y de gestión, entre otras. Asimismo, participan en campa-
ñas de sensibilización dirigidas a reivindicar la necesidad de introducir criterios éticos
en las relaciones comerciales.
TIENDAS: muchas veces vinculadas a Organizaciones No Gubernamentales, son las que
hacen llegar los productos de Comercio Justo a nuestras manos. Realizan del mismo
modo, una labor muy importante de difusión, sensibilización y promoción del
Consumo Responsable.
CONSUMIDORES: al ejercer el Consumo Responsable, no sólo ayudamos a mejorar las
condiciones laborales y medioambientales de las comunidades productoras, sino que
de igual forma, presionamos para cambiar las condiciones injustas de intercambio en el
mercado convencional.
ORGANIZACIONES INTERNACIONALES Y TERCER SECTOR: su objetivo es garantizar el
cumplimiento de los criterios de Comercio Justo, promover el desarrollo estructural de
los países más desfavorecidos, realizando auditorías y seguimiento a los actores del
ciclo comercial, entre otras muchas funciones.
El Comercio Justo intenta ser una alternativa al comercio convencional y se rige por los siguientes principios:
1.Garantiza un salario justo a los productores.
2.Se establecen relaciones comerciales a largo plazo y se realiza una parte del pago
por adelantado, lo que les da seguridad y les permite planificar su desarrollo.
3. Las organizaciones productoras dedican una parte de sus beneficios a las necesidades básicas de sus comunidades: sanidad, educación, formación laboral, etc..
4. No hay explotación infantil.
5. Se promueve:
• La participación en la toma de decisiones y el funcionamiento democrático.
• La igualdad entre hombre y mujer.
• La protección del medio ambiente.
Aunque hay más de mil millones de personas en el mundo en extrema pobreza, en
torno a 5.000.000 viven de su trabajo en condiciones dignas gracias al Comercio Justo.
¼ Criterios para los productores
±Los grupos productores procederán de colectivos registrados bajo forma de
Asociaciones, Sociedades o cualquier forma de microempresa, dependiendo del
tipo de objetivos y actividades que tengan como fin.
±Las Organizaciones de Comercio Justo -OCJs- se ocuparán de trabajar con organizaciones de países del Sur que:
• atraviesen problemas especiales debido a su pobreza, prácticas discriminatorias
y restricciones comerciales.
• estén comprometidos en el apoyo de la participación y las necesidades de los
trabajadores y trabajadoras, en especial, de las mujeres y de los grupos raciales
o sociales que sufren discriminación, explotación u otras situaciones injustas.
±Los grupos productores no deben instaurar una dependencia exclusiva de la
exportación y deberán tender a la creación y fomento de la economía social.
±La estructura organizativa interna de los grupos productores debe ser participativa
y democrática, evitando formas organizativas no representativas, de cargos estáticos o situaciones similares que impidan el desarrollo de los fines últimos del grupo
productor.
Extraemos y sintetizamos los siguientes criterios de comercio justo para los Productores:
Salarios justos y buenas condiciones de trabajo.
Mejoras en el bienestar social de los trabajadores y trabajadoras.
Establecimiento de cauces de participación de los trabajadores y trabajadoras en la
toma de decisiones.
Ser abiertos y transparentes sobre sus estructuras y actividades.
Preocupación por las repercusiones del comercio en la vida de las mujeres, hombres, niños y niñas, y promoción de la igualdad de oportunidades para las mujeres.
Protección de los derechos humanos, poniendo especial énfasis en los niños y niñas,
las mujeres y las poblaciones indígenas.
Respeto por el medio ambiente.
A continuación y en referencia a los procesos de producción, el producto debe llegar
con el máximo valor añadido posible, se incentivará el manufacturado en origen, la utilización de los recursos de la zona y tecnologías blandas no perjudiciales al medio ambiente, y concretamente en cuanto a la producción agrícola, se fomentará la que proceda de
la agricultura ecológica.
¼ Criterios para las Organizaciones de Comercio Justo:
± Podrán aceptar cualquier fórmula organizativa de acuerdo a su propio proyecto y
planteamiento de objetivos, siendo organizaciones gestionadas de forma participativa y democrática.
±No será una organización exclusivamente comercial, asumirán el compromiso de
trabajar por el fomento de prácticas comerciales justas y la denuncia de las injustas
relaciones comerciales internacionales, tanto a título individual como de forma
coordinada con el resto de organizaciones.
±Establecerán, como prioridad, compromisos con productores del Sur en régimen
de intercambio justo que se concretará en diferentes actividades: compra y distribución, venta en tiendas, financiación, asesoramiento, campañas de denuncia y/o
sensibilización, etc...
±Mantendrán una práctica no especulativa y mostrarán transparencia económica,
con especial atención respecto al destino de los beneficios originados por la actividad comercial.
±Tendrán especial cuidado en no propiciar situaciones de dependencia, incentivando la diversificación de mercados y productos en el propio contexto y realidad
social de los grupos productores.
Extraemos y sintetizamos los siguientes criterios de comercio justo para las Importadoras
y las Tiendas.
¼ Criterios para las Importadoras:
±Pagar a los productores un precio justo por su trabajo.
±Ofrecer a los productores prefinanciación o facilitarles el acceso a otras formas de
crédito.
±Ser transparentes sobre sus márgenes comerciales.
±Reducir en lo posible el número de intermediarios.
±Trabajar para conseguir un mercado seguro para los productores.
±Proporcionar apoyo a los productores mediante formación, asesoramiento técnico, investigación del mercado y/o desarrollo de nuevos productos.
±Facilitar información a los productores sobre los mercados para sus productos.
±Facilitar a las tiendas información sobre los productos y los productores.
±Ser abiertos y transparentes sobre su estructura y actividades.
±Trabajar con los productores para mejorar, desde el punto de vista medioambiental, métodos de producción, productos y embalajes.
±Dentro del funcionamiento de la propia importadora, ésta debe:
• proteger los derechos humanos, en especial de mujeres, niños/as y minorías.
• promover la igualdad de oportunidades.
• involucrar a trabajadores y trabajadoras en la toma de decisiones.
¼ Criterios para las Tiendas:
±Vender productos de Comercio Justo.
±Informar al público sobre sus objetivos, el origen de los productos, los productores y el comercio en general.
±Estar atendidas por personal, sea empleado o voluntario, comprometido con los
objetivos del Comercio Justo.
±Ser abiertas y transparentes en su estructura y actividades.
±Participar en campañas para mejorar la situación de los productores y para influir en
las políticas nacionales e internacionales.
Apoyándose en la concepción "Comercio, no ayuda" anteriormente mencionada, el
objetivo de las organizaciones de Comercio Justo es luchar contra la pobreza a través del
Comercio Justo, y conjuntamente, promoviendo campañas de presión y sensibilización.
Para la consecución de este objetivo, las organizaciones de Comercio Justo establecen
relaciones comerciales con productores desfavorecidos y con organizaciones y empresas que contribuyen a mejorar la posición de los países del Sur. Si bien su principal preocupación es la situación económica del productor, se da también mucha importancia al
desarrollo social, a la promoción de colectivos en riesgo o en situación de exclusión social
y a la protección del medio ambiente. De esta manera, se persigue mejorar su situación
estructural.
En los países del Sur, a las familias de campesinos y artesanos que trabajan en su casa o
en talleres les cuesta mucho trabajo obtener préstamos, tienen que afrontar la competencia de los grandes productores y dependen de intermediarios que les imponen alto precios para tener acceso a los mercados.
Las organizaciones de Comercio Justo tratan preferentemente con estos pequeños productores, compran el producto a organizaciones de productores (cooperativas o asociaciones) antes que a productores individuales.
Igualmente, las organizaciones de Comercio Justo colaboran con empresas y plantaciones. Para poder ser contrapartes del Comercio Justo, las empresas y las plantaciones, al
igual que los pequeños productores, deben cumplir los requisitos o principios generales
de Comercio Justo, ya que la preocupación principal es la situación de la contraparte y
eliminar el mayor número de intermediarios con el fin de que se beneficien justamente los
productores de los países del Sur.
En el Comercio Justo se eliminan todos los intermediarios innecesarios. Entre el importador y el consumidor está, por regla general, una organización importadora y la tienda.
Aunque también nos encontramos con que en el país de origen puede haber un EXPORTADOR que se ocupa de las ventas de pequeños productores sin capacidad de gestión,
y en el país de destino, nos encontramos con DISTRUBUIDORAS que compran a grandes
importadoras y distribuyen a las tiendas, pero siendo su objetivo el reducir costes, pues
se encarecen cuando el volumen de mercancías importadas es muy reducido
¼ El Comercio Justo en España
3
Mencionamos una encuesta bastante significativa realizada por Economistas sin Fronteras
en 2005: aunque el 40% de los ciudadanos de la Comunidad de Madrid ha comprado
alguna vez estos productos, alegan como dificultades el escaso número de tiendas de
Comercio Justo y la percepción de un mayor precio en las mismas. La red de Comercio
Justo minorista en España debe afrontar este reto. Por otro lado, tenemos la escasa introducción de productos en las grandes superficies y supermercados; hecho necesario para
extender el acceso a los mismos, pero garantizando que el crecimiento de ventas no
menoscabe los principios que rigen el Comercio Justo.
Entre el año 2004 y 2005, las ventas totales de productos de Comercio Justo en España
han registrado la mayor tasa desde que se inició la década, siendo de un 28,4%. La dimensión económica total de Comercio Justo en España es aún muy pequeña si la comparamos con los volúmenes del comercio tradicional, o bien con los del propio sector en el
resto de Europa. España representa para el año 2005 un porcentaje aproximado del 1,6%
(unos 15 millones de euros) del mercado total de Comercio Justo en Europa, ocupando
el octavo lugar dentro de los 15 países europeos que participan en la cuota de mercado de productos de Comercio Justo.
El tipo de productos que se venden a través del Comercio Justo es otro de los aspectos que ha ido cambiando con el avance del sector en nuestro país. En sus inicios, las ventas se centraban casi exclusivamente en productos de artesanía, con un pequeño porcentaje de textiles. Se trataba por tanto de artículos de regalo o decoración, que no entraban dentro de la cesta de la compra habitual para los consumidores. Con el paso del tiempo, estos porcentajes se han ido modificando; la alimentación ha hecho una fuerte incursión en el mercado, hasta superar el 60% de las ventas totales de productos de Comercio
Justo en el 2005, y siendo la mitad de este porcentaje la venta de café.
Este cambio es realmente importante, en la medida en que acerca los productos de
Comercio Justo a las necesidades de los clientes, alejándose del exotismo para acercarse
a lo cotidiano. Esto facilita la creación de una clientela fija, consumidora habitual de un producto determinado, frente a los picos de ventas de las compras estacionales o simbólicas de baja frecuencia, de artesanía o decoración, que se realizan básicamente en
Navidades o regalos de cumpleaños, etc.
En cualquier caso, la evolución no es unánime en todas las organizaciones, puesto que
algunas se mantienen centradas en la artesanía y los textiles, mientras que otras se han volcado en la alimentación.
Las organizaciones españolas de Comercio Justo
Las Organizaciones de Comercio Justo (OCJs) existentes en nuestro país se caracterizan
por su diversidad organizativa. En muchos casos, forman parte o tienen una relación muy
directa con ONGs de Desarrollo, mientras que en otros, pertenecen al mundo cooperativo. Precisamente esta variedad facilita su implantación en diversos ámbitos sociales.
Podemos distinguir dos grupos claramente diferenciados:
± por un lado, existen las organizaciones importadoras que posteriormente distribuyen los productos a otras OCJs, tiendas solidarias, incluso tiendas del mercado
convencional, además de un porcentaje que generalmente venden ellas mismas a
través de sus puntos de venta o canales habituales de distribución; este primer
grupo suele tener mayores dimensiones económicas y geográficas.
± y por otra parte, encontramos organizaciones que se dedican principalmente a la
venta al detalle en un punto de venta permanente, comercializando directamente
con los productores del Sur o bien a través de las importadoras.
La totalidad de las organizaciones dispone al menos de un punto de venta permanente, y muchas se están planteando la apertura de nuevas tiendas. La mayoría acude
frecuentemente a ferias, jornadas o encuentros, siendo también habitual la utilización
de redes de voluntarios que venden a través de sus puestos itinerantes de Comercio
Justo. Otras apuestan por sistemas alternativos de comercialización, tales como la
venta por catálogo (también los catálogos están ya disponibles en muchas páginas
webs de algunas organizaciones), la distribución a instituciones públicas o privadas,
el sistema de franquicias o el autoconsumo.
Las OCJs establecen sus relaciones en el sector del Comercio Justo tanto nacional como
internacionalmente. Son fundamentalmente las organizaciones que realizan tareas de
importación y distribución las que mantienen contacto con un mayor número de grupos
productores, redes internacionales de proveedores (EFTA) y organizaciones de etiquetado (FairTrade, Max Havelaar y TransFair, que desde 1997 se asociaron para crear FLO -
Internacional)
4
.
Actualmente, están incorporadas a las redes europeas tres OCJs españolas: INTERMÓN
e IDEAS pertenecen a EFTA desde 1996, mientras que "Alternativa 3" hace lo propio con
IFAT (Federación Internacional de Comercio Justo). Por otra parte, la Coordinadora de
Comercio Justo es miembro de NEWS (Network of European World Shops, red de tiendas solidarias de Europa).
Los productos de Comercio Justo son productos de calidad, comprados directamente a las cooperativas de productores, por los que se
pagan precios justos, eliminando en lo posible el número de intermediarios y teniendo en
cuenta los criterios o principios del Comercio Justo.
Alimentación: desde café, té, azúcar, chocolate, arroz y cereales hasta mermeladas tropicales, mieles, especias, frutos secos, bebidas...
Artesanía: muebles, objetos decorativos, bisutería, complementos, juguetes,
menaje del hogar, cosmética…
Papelería: tarjetas, cuadernos, carpetas, bolígrafos, lápices…
Textil: prendas de vestir, complementos, ropa de hogar, tapices...
Y, por supuesto, también encontrarás información sobre los productos y los
productores, libros, vídeos y otros materiales.
¼ Algunas iniciativas productoras de comercio justo
CAFÉ
Un ejemplo lo tenemos con la marca Altercafé, la marca de café de Comercio Justo de la
importadora española Alternativa 3: el grano de café proviene de tres cooperativas de África
y de América Latina que reciben un precio justo por su café, lo que les permite poner en marcha proyectos sociales para mejorar las condiciones de vida de miles de familias campesinas:
± Unión de la Selva de la Sierra madre de Chiapas de México, agrupa a 1.500 peque-
ños productores indígenas de las etnias Mam, Mocho, Tojolabal, Tzotzil y Tzeltal.
± Central de Cooperativas Cafetaleras del Norte de Nicaragua, agrupa a diferentes
cooperativas de la zona de Matagalpa, que aglutinan a unos 2.000 productores.
± Kagera Cooperative Union de Tanzania, con 60.000 pequeños productores.
Como ejemplo de los importantes logros alcanzados por una de estas cooperativas,
exponemos el siguiente:
Cooperativa cafetalera Unión de la Selva, en Chiapas, el estado más empobrecido y marginado de México, cerca de 1.500 familias campesinas integran, desde 1979 esta cooperativa cafetalera con una estructura compleja y bien organizada con la que han conseguido:
Comercializar su propio café y hacer frente a los "coyotes", que son los intermediarios entre los productores y las multinacionales.
Cultivar un café biológico mediante el uso de fertilizantes orgánicos, control biológico de plagas, etc., lo cual redunda en un café de mayor calidad.
Mejorar las comunicaciones construyendo caminos.
Diversificar la producción agrícola y garantizar la seguridad alimentaria de las comunidades.
Programas sociales: mejorar la educación, la sanidad y la vivienda.
Ampliar el abanico de sus actividades en torno al café: apertura de cafeterías en
México y en nuestro país.
Cooperativa El Ceibo, en el Alto Beni boliviano alrededor de 1.000 familias campesinas,
agrupadas en 38 cooperativas de base controlan la producción y la comercialización de
su cacao. Estos son los logros que han conseguido:
Produce alrededor de 1.500 toneladas de cacao de primerísima
calidad al año, la mayor parte de cultivo biológico. El 70% de la
producción se destina a la exportación y el 30%, al mercado
local.
Reviste especial importancia el paso dado hacia la transformación de parte de su producción: en una fábrica de su propiedad situada en La Paz, elabora manteca de cacao, cacao en
polvo y dulces de chocolate.
Son los propios campesinos quienes gestionan la
cooperativa. Para ello, se ocupan de la capacitación profesional no sólo en lo que se refiere a la
producción sino también en materia de administración, contabilidad y gestión.
Mejora de los cultivos mediante injertos.
Diversificación con productos como el café o los
cítricos, evitando así la dependencia de un único
producto.
La asociación Kuapa Kokoo de Ghana, creada en 1993
por los propios campesinos para comercializar el cacao, se
encuentra en fase de rápido crecimiento. Tiene un funcionamiento muy participativo y reinvierte parte de los ingresos en
formación, en las necesidades básicas de la comunidad y en el mantenimiento de su cultura. Podemos encontrar cacao procedente de esta asociación en las marcas de chocolate Mascao y Equit. Esta última contiene, además, azúcar de caña procedente de Cuba.
OTROS ALIMENTOS
MCCH, Maquita Cushunchi Comercializando como Hermanos, surge en Quito, Ecuador.
Los fundadores crearon una alternativa de comercialización que diera respuesta a las
necesidades de productores y compradores locales. En la actualidad trabajan con productos de alimentación (azúcar, mermeladas, galletas, dulces) que llegan hasta nosotros a
través de las tiendas de Comercio Justo. Dedican parte de los ingresos a la comunidad y,
con ello, han desarrollado programas de salud, formación y una cooperativa de ahorro y
crédito
ARTESANÍA
Mzilikazi: el Centro de Arte y Artesanía de Mzilikazi, en Zimbabwe, ofrece aprendizaje
y empleo a unos 150 jóvenes para realizar trabajos de cerámica con diseños propios
de la cultura de la zona. En Mzilikazi hay una proporción muy igualada de hombres y
mujeres, sin discriminación de etnias.
Preda: es una organización que proporciona empleo a niños de la calle y jóvenes con
problemas en Filipinas. Trabajan el mimbre, realizando cestos y otros artículos para el
hogar, y bisutería de plata y madera.
La Malinche: está formada por un grupo de mujeres de las comunidades indígenas de
Chile y El Zapote, en Nicaragua. Trabajan productos hechos a mano de tejido y cuero:
mochilas, bolsos, carteras, billeteras, etc. Las mujeres que integran La Malinche han encontrado una alternativa de trabajo en una zona muy afectada por la crisis económica.
TEXTILES
YWCA: En Bangladesh 250 mujeres trabajan en YWCA fabricando diversos artículos textiles. Se trata de familias con dificultades para subsisitir que gracias a este trabajo pueden cubrir sus necesidades mínimas. Un 10% del dinero obtenido se destina a un
fondo de ahorro para servicios básicos.
Brac es una ONG que trabaja en Bangladesh por el desarrollo de la población más
pobre y desfavorecida, centrándose en el apoyo a las mujeres, que sufren una gran discriminación. Esta agrupación de cooperativas, fundada en 1978, tiene la mayoría de sus
tiendas en Bangladesh y otras dos en Londres y Vancouver. En las 350 cooperativas
locales que la forman, trabajan más de 30.000 personas, un 85% de las cuales son
mujeres. Aarong es el brazo comercial de Brac, que asesora a pequeños productores
sobre temas comerciales.
Brac-AAarong destina parte de sus beneficios a numerosos proyectos sociales:
Ayuda a mantener 35.000 colegios, beneficiando a más de un millón de niños.
Proporciona asistencia sanitaria.
Ofrece la posibilidad de conseguir préstamos con tipos blandos de interés.
Apoya a muchas mujeres en proyectos de creación de mini-empresas.
Y muchas otras cooperativas como La Unión de Comunidades Indígenas del la región
del Istmo (UCIRI) de México, El Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE)
de Argentina, Mahaguthi Craft UIT a Consciencie de Nepal, Creative Handicrafts de India, y
un largo etcétera por mencionar.
Redes Internacionales y la Asociación del Sello
de Productos de Comercio Justo en España.
En los últimos años el consumidor viene requiriendo más garantías
sobre la calidad, el origen y la producción de sus compras, empezando a ser cada vez
más frecuente el solicitar información y comprobar si el producto dispone de alguna certificación o sello explicativo, así como si las prácticas de las empresas son social y
medioambientalmente aceptables y respetuosas.
En líneas generales, nos encontramos con los certificados de las cadenas de distribución
ética (IFAT - Iternational Federation of Alternative Trade; FLO - Fair Trade Labelling Organisation;
EFTA - European Fair Trade Association); las marcas éticas (Max Havelaar en Holanda: la primera marca ética nacida en Europa en 1988; Rugmark para las alfombras en Alemania); los certificadores de calidad ética y social (Tranfair, SAI - Social Accountability International que ha creado la certificación SA8000) y finalmente la gran distribución, que ha empezado a introducir
en los supermercados e hipermercados secciones de productos de Comercio Justo.
La red internacional FINE agrupa a cuatro grandes organizaciones europeas:
IFAT (The International Fair Trade Association) es la organización paraguas de organizaciones de Comercio Justo de 60 países de todos los continentes. La mayoría de
los aproximadamente 200 miembros son organizaciones productoras e importadoras. El logo IFAT está a disposición de las organizaciones miembros, siempre
que hayan aprobado el sistema de auto-evaluación con éxito. El sistema tiene los
componentes siguientes: self-assessment (auto-valuación), mutual review (revisión
mutua), external verification (verificación externa). El logo IFAT no es para productos, sino que distingue a las organizaciones receptoras que se comprometen activa y exclusivamente a favor del Comercio Justo.
NEWS! (Network of the European World Shops) es una red de tiendas
solidarias de Europa que facilita la cooperación y la unión entre sus
miembros: 15 organizaciones nacionales de tiendas de 13 países representando un
total de aproximadamente 2.700 tiendas de Comercio Justo. Los objetivos de NEWS!
son los siguientes: unir los intereses de las tiendas del mundo y sus organizaciones; iniciar, dirigir y promover campañas y coordinar actividades a escala europea teniendo
como objeto fomentar el Comercio Justo y el trabajo de las tiendas; cooperar con otras
organizaciones fomentando el Comercio Justo y el trabajo de las tiendas.
EFTA (European Fair Trade Association) asociación de once importadoras en
nueve países europeos. Los miembros de la EFTA desean hacer el Comercio
Justo más efectivo y eficaz, armonizando y coordinando sus actividades,
especialmente en el área de cambio de informaciones sobre los socios comerciales, los productos y asuntos de mercadeo. Un monitoreo común llevado a cabo según los principios
de la división de trabajo, facilita el trabajo de las importadoras y sus contrapartes.
Actuaciones de presión política a escala europea e internacional dan una voz más alta a las
organizaciones productoras.
FLO (Fair Trade Labelling Organizations International) es la federación central
internacional de 19 iniciativas nacionales otorgantes del sello de calidad del
comercio Justo. Certifica productos como: café, te, arroz, frutas frescas, jugos,
cacao, azúcar, miel, balones de deporte, vino, flores,... A fin de desempeñar
la tarea principal - la certificación de productores y realización de transacciones de Comercio Justo - se fundó una organización independiente de certificación, FLO Cert GmbH. Nos centraremos en ésta última.
La certificación de productos de Comercio Justo comenzó en Holanda
con el sello Max Havelaar en el año 1988, a este le siguieron otros sellos
como TransFair en Alemania o FairTrade en el Reino Unido, entre otros. En el año 1997
las organizaciones que regulaban estos sellos se asociaron para reforzar el trabajo en
común y crearon FLO Internacional (Fair Trade Labelling Organizations International) y
desde el 5 de Octubre de 2005 el sistema de certificación FLO está en funcionamiento en España.
Los principales actores de Comercio Justo habían sido hasta entonces los productores
del Sur y los consumidores del Norte unidos por las Organizaciones de Justo (OCJs),
las Tiendas de Comercio Justo (TCJs) y las ONGs, ahora con el sello de Comercio Justo
aparecen otros actores las empresas convencionales: exportadores, importadores,
transformadores, usuarios del sello y distribuidores.
La Asociación del Sello de Productos de Comercio Justo FLO tiene por objetivo la promoción del sello de garantía FAIRTRADE para productos de Comercio Justo y aumentar
la presencia y consumo de productos con dicho distintivo entre los consumidores y
consumidoras del Estado Español.
El sello FAIRTRADE certifica que el producto que lo lleva cumple los criterios internacionales del Comercio Justo. Inspectores de FLO (Fairtrade Labelling Organizations
International) controlan a productores y comerciantes para garantizarlo.
Datos significativos:
• Se utiliza en 22 países.
• Beneficia a un millón de productores y productoras de 548 organizaciones de
50 países del Sur.
• 45.000 puntos de venta en Europa venden productos con sello.
La Asociación del Sello de Productos de Comercio Justo cuenta con un Comité de
Control para el proceso de concesión del sello. El Comité, estructuralmente independiente, tendrá en cuenta aspectos generales del comportamiento empresarial de las compa-
ñías, asegurando que no se den claras incoherencias con respecto a los principios del
Comercio Justo.
El sello FAIRTRADE garantiza como procedentes de Comercio Justo, algunos productos
que se pueden encontrar tanto en las tiendas especializadas de Comercio Justo, como
en los comercios tradicionales, supermercados y otras grandes superficies donde compramos habitualmente; si bien estas últimas aún hoy poseen escasa introducción de los
productos de Comercio Justo.
Existen 14 gamas de productos que pueden recibir la certificación de FAIRTRADE: café, té,
cacao, frutas frescas y deshidratadas, frutos secos, azúcar, arroz, miel, zumos, quinua, algodón y balones de fútbol; y se continúa trabajando para ir ampliando la gama de productos
certificados y proyectarlo para que podamos encontrarlos en nuestros lugares usuales de
compra.
Responsabilidad Social: Compra Pública Ética
7
La creación de un movimiento fuerte y reconocible de opinión pública en favor de la responsabilidad social de las empresas puede ser una argumentación convincente en favor del diálogo
empresa-consumidores-sindicato-administración. A
este respecto, cabe resaltar la reciente iniciativa de
organizaciones del tercer sector en España, que han
constituido el "Observatorio de Responsabilidad
Social Corporativa", como respuesta desde la ciudadanía, a las ya existentes en el sector empresarial.
Por otro lado, las iniciativas de Compra Pública Ética contribuyen a hacer más coherente el consumo institucional con los principios de los servicios públicos y a impulsar unas
políticas de responsabilidad social más comprometidas por parte de las empresas proveedoras. Se pretende conseguir materializar el esfuerzo de las administraciones públicas
para dotarse de mecanismos que les aseguren que los productos adquiridos han sido elaborados respetando los derechos fundamentales de los trabajadores y trabajadoras, entre
otros.
Tanto las administraciones locales, como las estatales y las supranacionales, desde sus
respectivos ámbitos de competencias, pueden ejercer una influencia directa a través de
la regulación y de la compra pública, y una influencia indirecta en las decisiones de la ciudadanía y de las empresas mediante el ejemplo de introducción de principios de
Consumo Responsable en los contratos administrativos, así como con acciones de sesibilización e información.
¼ Algunos ejemplos de Compra Pública Ética
La práctica del Comercio Justo se ha incrementado en España en los últimos años y las
ventas de estos productos han aumentado en un 47%, mientras que esta materia es todavía "una asignatura pendiente" de la Administración.
En Europa disponemos de algunos ejemplos de práctica de compra pública ética: el
Ayuntamiento de Amsterdam, por ejemplo, ya dispone de un manual para la compra de
ropa de trabajo 'limpia' y ha incorporado diversos criterios sociales en sus concursos de
compra de uniformes y textiles. La ciudad alemana de Munich, por su parte, aceptó en
2002 una resolución para la lucha contra los suministros producidos en condiciones de
explotación infantil, y desde entonces se exigen certificados que demuestren que en la
elaboración de los productos no han intervenido menores.
España sigue estando rezagada respecto a Europa también en este asunto, aunque ya
comienzan a verse referencias en algunas administraciones autonómicas y locales.
7
Fuente: el "Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa" www.obrsc.org y en artículos de
"Canal Solidario" www.canalsolidario.org .
El Consumidor, ¿qué papel juega?
Más allá de las normales ocasiones que tenemos como ciudadanos
para expresar un juicio, desde el voto electoral a la participación activa
a través de las numerosas organizaciones y asociaciones, está la realidad de que todos
somos consumidores, titulares de la facultad de tomar decisiones que pueden influenciar
enormemente en el comportamiento de las empresas, de los gobiernos, y por tanto, en las
reglas injustas que rigen el actual orden internacional.
Los consumidores y consumidoras somos el eslabón final que hace posible el
Comercio Justo. Al utilizar con responsabilidad nuestro poder y valorar no sólo el precio de los productos, sino también las condiciones sociales y medioambientales en
que se han fabricado, podemos decir NO a la explotación y contribuir a establecer
relaciones comerciales más equitativas.
Hoy es más difícil para cualquier empresa pasarse por alto los derechos básicos de trabajadores y trabajadoras en muchos países en vía de desarrollo. Saben que sectores
importantes de consumidores bien informados pueden ejercer su derecho de veto, sencillamente dejando de comprar sus productos, enviando comunicados de protesta o
apoyar las campañas de las organizaciones de Comercio Justo u otras ONGs.
En este contexto, decididamente, un comportamiento responsable tanto individual
como colectivo de los consumidores juega un papel central que puede alcanzar una gran
influencia sobre las estrategias de las empresas.
Desde la elección responsable en las tiendas (invirtiendo en calidad y no sólo en bajo
precio) a la educación, información y formación para decisiones de consumo socialmente responsables (protección de la salud, del medioambiente, de los derechos de los trabajadores y productores), a la evaluación comparativa de la calidad social y medioambiental de los bienes (certificación biológica, ecológica, social) el camino es lento, costoso y a menudo incomprendido u obstaculizado.
Pero la realidad es la siguiente, detrás de cada paquete de cacao o de café de
Comercio Justo vendido existe un fenómeno social y político que ya no se puede subestimar: la emergente conciencia de quien los compra; una crítica al mundo en que vivimos
a partir de lo que consumimos diariamente.
Por lo tanto, antes de comprar algo, merece la pena dedicar unos minutos a preguntarnos
qué hay detrás de la etiqueta, quién está allí y sobre todo cómo actúa: un pequeño ejercicio diario de concienciación y responsabilidad para consumidores maduros y responsables.
Entre los consumidores cada vez se suman más consumidores solidarios que se plantean elegir con responsabilidad los productos que van a adquirir y las implicaciones que
conlleva su elección.
¼ Consejos y buenas prácticas del Consumidor Responsable
±Intenta practicar un consumo crítico y responsable: adquiere solamente los productos que necesites.
±Infórmate de las condiciones sociales y medioambientales en que han sido elaborados. Plantea las siguientes cuestiones:
¿quiénes produjeron este producto?
¿en qué condiciones laborales?
¿hubo un impacto ecológico negativo durante su producción?
¿adónde va a parar el dinero que hemos pagado y cómo se reparte?
±Participa en campañas de sensibilización y de presión política.
±Informa y recomienda el Comercio Justo y sus productos a tu familia, amigos y compañeros de trabajo.
±Pregunta a tu ayuntamiento si utiliza productos de Comercio Justo o tiene planteada la Compra Pública Ética.
Confiar en estas pequeñas acciones:
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c o m e r c i o j u s t o c o m e r c i o j u s t o
"Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los medios de producción y de cambio, no
expropian las cuevas de Alí Babá. Pero quizá desencadenen la alegría de
hacer, y la traduzcan en actos. Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad
y cambiarla aunque sea un poquito, es la única manera de probar que la
realidad es transformable". Eduardo aleano
Dónde puedo encontrar comercio justo?
La información sobre Comercio Justo se puede encontrar en las
Organizaciones No Gubernamentales dedicadas a trabajar en este tema.
Además, en las tiendas de Comercio Justo también podemos encontrar
información y productos. El distintivo para reconocer las tiendas de
Comercio Justo "JUSTO AQUÍ", en España, es el símbolo que indica que
pertenece a la Coordinadora Estatal de Organizaciones de Comercio Justo y significa que
la actividad que realizan coincide con los objetivos de la organización.
Enlaces sobre comercio justo
Direcciones y webs de interés
COPADE
C/Cardenal Siliceo 22.
28002 MADRID
Tfn: 91-415-54-05
email:info@copade.org
IEPALA
C/ Hermanos García Noblejas 41 bis
28037 MADRID
Tel./fax: 913 67 16 86 2
e-mail: mpilar@eurosur.org
LA CEIBA
C/Amor de Dios 11
28014 MADRID
Tel: 91 4201617
e-mail: ceiba@retemail.es
INTERMÓN OXFAM
• IO c/ Alberto Aguilera 15, 28015
Tel 902 330 331
Fax: 915591667
e-mail: info@intermonoxfam.org
•IO C/ Goya, 68 28009
Tel:902 330 331
Fax: 915591667
e-mail: info@intermonoxfam.org
• IO Centro Comercial Plaza Norte.
Plaza del Comercio, 11-12. Local 96.
28700.
• IO C/ Magdalena 5 28901.Getafe.
Tel./fax: 902 330 331
e-mail: info@intermonoxfam.org
OCSI
C/ Ercilla 48 1º B; 28.005
Tel: 914 74 57 02
ocsi.madrid@nodo50.org
SETEM
C/ Gaztambide 50
28.015 MADRID
Tel.: 915 49 91 28
Fax: 91 5499572
e-mail: madrid@setem.org
SODEPAZ
C/ Puebla 15
28.004 MADRID
Tel.: 915 22 80 91
Fax: 915 23 38 32
e-mail:sodepaz.comercio@nodo50.org
SOLIDARIDAD INTERNACIONAL
Tienda Solidaria LCE.
Ronda de Valencia 2,
28012 MADRID
tel.914681420
email:tienda@solidaridad.org
SUBIENDO AL SUR
C/ Ponciano 5 28.015
Tel.: 91 54811 47
Fax: 548 11 47
e-mail: menendez@eurosur.org
UNIS
Avda.de Canillejas a Vicalvaro 66
28022 MADRID
Tel: 913931896
AZOCHE
C/Jorge Juan, 76 28004
Tel: 91 575 68 71
CENTRO SOLIDARIO
C/ Honduras 6 28020
Tel: 91 671 75 43
UTOPIA
Avda de la Zaporra 23
28.100 MADRID
Tel./fax: 916 63 81 6
www.comerciojusto.org
Coordinadora Estatal de Comercio Justo: nace en 1996 con la finalidad de potenciar el
comercio justo en nuestro país. En ella están integradas las organizaciones que importan los productos y las tiendas que los venden.
www.eftafairtrade.org
Asociación europea del Comercio Justo que agrupa a 11 importadoras europeas.
www.fairtrade.net y www.sellocomerciojusto.org
Fairtrade Labelling Organizations International (FLO), organización internacional en la que
se integra la Asociación del Sello de Productos de Comercio Justo.
www.ifat.org
Federación Internacional de Comercio Alternativo que agrupa a más de 160 organizaciones.
www.worldshops.org
Red Europea de Tiendas de Comercio Justo (NEWS) que agrupa a las asociaciones
nacionales de tiendas de Comercio Justo. Representa a más de 3000 tiendas de 15 paí-
ses europeos
www.consumersinternational.org
Entidad internacional de defensa de los derechos de los consumidores que agrupa a
234 organizaciones en 113 países.